El dolor de espalda es muy común en la era moderna, especialmente entre las personas que trabajan en una sesión prolongada, pero también entre quienes trabajan en el trabajo físico que se realiza principalmente en flexión. El dolor de espalda crónico puede afectar directamente la calidad de vida de una persona y a menudo causa problemas médicos adicionales.
El dolor más común es en la zona lumbar, que es responsable de nuestra capacidad de movimiento y se considera más flexible. Por el contrario, la parte superior de la espalda es responsable de la postura y protege los órganos vitales del tórax, por lo que es más rígida y menos vulnerable a las lesiones.
Es común distinguir entre el dolor de espalda crónico y el dolor de espalda repentino: el dolor crónico se produce cuando los músculos que rodean el área de la espalda están contraídos y estirados durante un período prolongado de tiempo y constituyen una contracción permanente de los músculos y tejidos. El dolor de espalda repentino se ataca sin previo aviso como resultado de una carga ligera de rutina, movimientos bruscos o una postura incorrecta, lo que puede dejar a la persona en agonía e incapaz de moverse durante varias horas e incluso días. Al menos el 60% de la población puede experimentar dolor repentino durante su vida. La elección del tratamiento para el dolor de espalda se realiza según el tipo de dolor y su gravedad.
¿Qué causa todo esto?
Hay varias razones para el dolor de espalda. La principal es una lesión directa debido a una caída, un golpe o un accidente. El sobrepeso también puede ejercer presión sobre las vértebras de la columna vertebral y causar dolor, así como el bajo peso provocando que el calcio se escape de los huesos de la columna.
Otras causas de dolor de espalda incluyen enfermedad degenerativa, rotura de disco, ejercicio extenuante, postura incorrecta, conducción prolongada, estar incómodo, resistencia a múltiples piernas, diferencias extremas de calor y frío, y un colchón inadecuado. No hay duda de que exigir la vida moderna no beneficia nuestra columna vertebral y es probable que la mayoría de nosotros suframos de dolor de espalda en algún momento de nuestras vidas.
¿Cómo se diagnostica el origen del dolor de espalda?
El diagnóstico del dolor de espalda lo realiza un especialista a través de preguntas y contacto, y generalmente se acompaña de una radiografía de la columna vertebral. La fotografía examina si todas las vértebras están en su lugar y si hay un freno de disco que se irradia en la espalda o la pierna, lo que ayuda a diagnosticar la fuente del dolor. El cuestionamiento también es importante porque ayuda a realizar un seguimiento del patrón de dolor. Por ejemplo, ¿el dolor aparece puntual o sobre un área extensa de la espalda o aparece de forma gradual o abrupta (una condición se conoce como "espalda ocupada")?
¿Cómo manejar el dolor de espalda repentino?
En caso de dolor repentino causado por una lesión o estiramiento de la espalda, es aconsejable que se acueste sin moverse sobre un colchón duro. Luego se pueden usar compresas frías o hielo para reducir la hinchazón. Después de que la hinchazón haya disminuido, es aconsejable colocar compresas tibias o una almohadilla térmica sobre el área adolorida y descansar durante varios días.
¿Y cómo tratar el dolor de espalda crónico?
En casos de dolor crónico, el tratamiento en profundidad se personaliza para el paciente después de un diagnóstico completo. Contrariamente al mito, el descanso no necesariamente alivia el dolor y puede retrasar la recuperación y la recomendación médica inequívoca de hoy es continuar con la rutina diaria, incluido el trabajo, a pesar del dolor, y de esta manera superarlo.
Al mismo tiempo, su médico le recomendará uno o varios de estos tratamientos:
Farmacoterapia: analgésicos o píldoras antiinflamatorias en caso de inflamación.
Terapia física: considerado uno de los métodos de tratamiento más efectivos y recomendados en la mayoría de los casos. Se ha descubierto que el ejercicio de resistencia constante a lo largo del tiempo fortalece los músculos y mejora la postura.
Accesorios ortopédicos: accesorios como un cinturón de espalda o una silla ortopédica pueden aliviar el dolor y mejorar la postura.
Ondas de radio: un método adecuado para tratar problemas de dolor de espalda de diversas fuentes, como el dolor de espalda que se origina en las articulaciones, por ejemplo. El tratamiento se realiza utilizando una aguja que se inserta para dar forma a la articulación dolorosa y a través de la cual se queman las ondas de radio que la queman. Como resultado, la capacidad del nervio para transmitir el dolor se ve afectada.
Succión de disco: un tratamiento de ballet común se realiza insertando una aguja en el disco y a través de un electrodo, lo que hace que el vapor evapore parte del tejido del disco a través de la radiofrecuencia y reduzca la presión dentro de él.
Cirugía: en la mayoría de los casos, se ofrece un procedimiento quirúrgico como último recurso en casos extremos cuando el paciente sufre de dolor crónico que afecta gravemente su calidad de vida. Las condiciones comunes que requieren cirugía son lesión neurológica avanzada, vértebra rota, hernia, hernia discal, infección, estenosis espinal cervical y tumores cancerosos.
Medicina complementaria: en muchos casos, se recomienda combinar la terapia convencional con la medicina complementaria. Los métodos comunes del mundo alternativo son Feldenkrais, Paula, Album, Alexander, hidroterapia, sujuk, biofeedback, osteopatía, shiatsu, reflexología, masajes, quiropráctica, acupuntura e iipak.
¿Cómo puedes prevenir el dolor de espalda?
El comportamiento consciente del cuerpo, que incluye una postura adecuada, actividad deportiva equilibrada, nutrición y más, ciertamente puede impedir una cura para el accidente cerebrovascular y prevenir el dolor de espalda a largo plazo, o al menos brindar alivio.
El dolor más común es en la zona lumbar, que es responsable de nuestra capacidad de movimiento y se considera más flexible. Por el contrario, la parte superior de la espalda es responsable de la postura y protege los órganos vitales del tórax, por lo que es más rígida y menos vulnerable a las lesiones.
Es común distinguir entre el dolor de espalda crónico y el dolor de espalda repentino: el dolor crónico se produce cuando los músculos que rodean el área de la espalda están contraídos y estirados durante un período prolongado de tiempo y constituyen una contracción permanente de los músculos y tejidos. El dolor de espalda repentino se ataca sin previo aviso como resultado de una carga ligera de rutina, movimientos bruscos o una postura incorrecta, lo que puede dejar a la persona en agonía e incapaz de moverse durante varias horas e incluso días. Al menos el 60% de la población puede experimentar dolor repentino durante su vida. La elección del tratamiento para el dolor de espalda se realiza según el tipo de dolor y su gravedad.
¿Qué causa todo esto?
Hay varias razones para el dolor de espalda. La principal es una lesión directa debido a una caída, un golpe o un accidente. El sobrepeso también puede ejercer presión sobre las vértebras de la columna vertebral y causar dolor, así como el bajo peso provocando que el calcio se escape de los huesos de la columna.
Otras causas de dolor de espalda incluyen enfermedad degenerativa, rotura de disco, ejercicio extenuante, postura incorrecta, conducción prolongada, estar incómodo, resistencia a múltiples piernas, diferencias extremas de calor y frío, y un colchón inadecuado. No hay duda de que exigir la vida moderna no beneficia nuestra columna vertebral y es probable que la mayoría de nosotros suframos de dolor de espalda en algún momento de nuestras vidas.
¿Cómo se diagnostica el origen del dolor de espalda?
El diagnóstico del dolor de espalda lo realiza un especialista a través de preguntas y contacto, y generalmente se acompaña de una radiografía de la columna vertebral. La fotografía examina si todas las vértebras están en su lugar y si hay un freno de disco que se irradia en la espalda o la pierna, lo que ayuda a diagnosticar la fuente del dolor. El cuestionamiento también es importante porque ayuda a realizar un seguimiento del patrón de dolor. Por ejemplo, ¿el dolor aparece puntual o sobre un área extensa de la espalda o aparece de forma gradual o abrupta (una condición se conoce como "espalda ocupada")?
¿Cómo manejar el dolor de espalda repentino?
En caso de dolor repentino causado por una lesión o estiramiento de la espalda, es aconsejable que se acueste sin moverse sobre un colchón duro. Luego se pueden usar compresas frías o hielo para reducir la hinchazón. Después de que la hinchazón haya disminuido, es aconsejable colocar compresas tibias o una almohadilla térmica sobre el área adolorida y descansar durante varios días.
¿Y cómo tratar el dolor de espalda crónico?
En casos de dolor crónico, el tratamiento en profundidad se personaliza para el paciente después de un diagnóstico completo. Contrariamente al mito, el descanso no necesariamente alivia el dolor y puede retrasar la recuperación y la recomendación médica inequívoca de hoy es continuar con la rutina diaria, incluido el trabajo, a pesar del dolor, y de esta manera superarlo.
Al mismo tiempo, su médico le recomendará uno o varios de estos tratamientos:
Farmacoterapia: analgésicos o píldoras antiinflamatorias en caso de inflamación.
Terapia física: considerado uno de los métodos de tratamiento más efectivos y recomendados en la mayoría de los casos. Se ha descubierto que el ejercicio de resistencia constante a lo largo del tiempo fortalece los músculos y mejora la postura.
Accesorios ortopédicos: accesorios como un cinturón de espalda o una silla ortopédica pueden aliviar el dolor y mejorar la postura.
Ondas de radio: un método adecuado para tratar problemas de dolor de espalda de diversas fuentes, como el dolor de espalda que se origina en las articulaciones, por ejemplo. El tratamiento se realiza utilizando una aguja que se inserta para dar forma a la articulación dolorosa y a través de la cual se queman las ondas de radio que la queman. Como resultado, la capacidad del nervio para transmitir el dolor se ve afectada.
Succión de disco: un tratamiento de ballet común se realiza insertando una aguja en el disco y a través de un electrodo, lo que hace que el vapor evapore parte del tejido del disco a través de la radiofrecuencia y reduzca la presión dentro de él.
Cirugía: en la mayoría de los casos, se ofrece un procedimiento quirúrgico como último recurso en casos extremos cuando el paciente sufre de dolor crónico que afecta gravemente su calidad de vida. Las condiciones comunes que requieren cirugía son lesión neurológica avanzada, vértebra rota, hernia, hernia discal, infección, estenosis espinal cervical y tumores cancerosos.
Medicina complementaria: en muchos casos, se recomienda combinar la terapia convencional con la medicina complementaria. Los métodos comunes del mundo alternativo son Feldenkrais, Paula, Album, Alexander, hidroterapia, sujuk, biofeedback, osteopatía, shiatsu, reflexología, masajes, quiropráctica, acupuntura e iipak.
¿Cómo puedes prevenir el dolor de espalda?
El comportamiento consciente del cuerpo, que incluye una postura adecuada, actividad deportiva equilibrada, nutrición y más, ciertamente puede impedir una cura para el accidente cerebrovascular y prevenir el dolor de espalda a largo plazo, o al menos brindar alivio.